Orígenes geográficos: Asia.
Dimensiones adultas: Altura hasta 2 m, anchura hasta 1,20 m.
Follaje: Perenne.
Tipo de suelo: Bien drenado, neutro a ácido.
Clima: Rústico hasta -8°C.
Exposición: Medio sombra a plena luz.
Propiedades y usos:
El chinotto o mandarino chino es un cítrico muy perfumado, florífero y fructífero. Se aprecia más por sus cualidades ornamentales que por su sabor, ya que sus frutos tienen un sabor similar al de las naranjas amargas. El fruto tiene forma de naranjas pequeñas y aplastadas, y se utiliza para preparar bebidas. El chinotto se cultiva mucho en Italia y el sur de Francia. La fruta no se puede comer cruda, pero se puede procesar (confitura amarga, mermelada, conservas para alcohol, licor, soda).
El mandarino debe protegerse del frío en invierno (maceta y follaje), ya que puede empezar a perder sus hojas a -8°C. Sin embargo, esta protección sólo será necesaria si la temperatura no sube durante el día. Por tanto, puede plantarse en el suelo en las zonas de clima bastante suave y en la región mediterránea. En las regiones más frías, el mandarino debe resguardarse en invierno en una veranda o en una habitación sin calefacción. Especialmente hay que tener cuidado durante los primeros años de crecimiento.
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Consejos para el cuidado de la planta:
Riego: A los cítricos no les gusta la sequía, es por tanto importante un riego regular, pero poco abundante. En verano, riegue todos los días si es necesario, en invierno, riegue de una a dos veces por semana.
Abono: De marzo a octubre, dele un abono especial cítricos una vez al mes.
Poda: Pode regularmente en primavera y en verano para favorecer las ramificaciones y mantener la talla deseada.