• Más detalles
  • Embadurnar el tronco de los árboles frutales es una vieja técnica que lucha contra muchas enfermedades y devastadores, y esto respetando el medio ambiente. ¡A usar sin moderación!

    Una receta ancestral
    Aplicar un ungüento sobre los árboles ya se usaba en el siglo XVI, como atesta un manual de 1543. Ya se tenía la costumbre de embadurnar el tronco de los árboles con una cataplasma arcillosa, llamada “ungüento de Sain-Fiacre”. En su origen, esta técnica servía a ayudar las heridas de los cortes a cicatrizar. Hoy en día sirve sobre todo, para luchar contra todos los enemigos del vergel, para empezar por los hongos que causan destrozos en las frutas y ramas, al igual que contra los insectos devastadores de las frutas.

    ¿Cal o arcilla?
    La receta tradicional usa un agua de cal, es decir, cal viva que desleímos con agua; Esta operación no carecía de peligros, y la cal viva se volvió difícil de encontrar. Nos apercibimos que un ungüento de arcilla era también beneficioso. Bastaba con mezclar arcilla con agua para obtener el ungüento. La tierra arcillosa del jardín conviene si no tiene piedras. La arcilla que encontramos en el comercio blanca o verde, está perfectamente adaptada. La consistencia debe ser bastante liquida pero no demasiado, como una pintura bastante espesa o una pasta de crepes. A esta pasta vamos a añadir varios compuestos para reforzar su eficacidad.

    Cataplasma mejorada
    A la arcilla que ha diluido al principio, añada los compuestos que aumentarán la adherencia a la corteza;
    - la leche: espesa la solución haciéndola más pegajosa.
    - clara de huevo: ayuda a la mezcla a pegarse al tronco al secar.
    - ceniza de madera: sin residuos (trozos de carbón de madera), le da la potasa y otros compuestos desinfectantes que reforzarán el efecto del ungüento.
    Podrá así añadir extractos vegetales que aumentarán su efecto insecticida, como el purín de una ortiga joven, o el purín de la planta llamada cola de caballo madura, un extracto de tanaceto o de ajenjo, etc. Para acabar, puede añadir un poco de caldo bordelés, como de hecho hacían los antiguos jardineros. Esto aumenta la acción del ungüento contra las formas invernantes de hongos, responsables de tantas enfermedades.

    Cuándo y cómo aplicarla
    Aplique esta capa con un pincel, ahogando generosamente las concavidades de la corteza. Pase hasta la base de las ramas ‘carpinteras’, es decir, las ramas principales del árbol. El ungüento puede aplicarse tanto en los jóvenes como en los viejos pero es más útil a partir del momento en el que ha empezado a producir sus frutos, unos años más tarde de su plantación. El mejor momento para intervenir es un periodo en el que el tiempo es seco, incluso si hiela por la noche. El ungüento tendrá el tiempo de secar y podrá pasar una segunda capa si la primera se ha agrietado.
  • Fotos (3)
  • Embadurnar los árboles frutales
    Embadurnar los árboles frutales
    Los troncos embadurnados tienen un aspecto curioso, ¡pero están bien protegidos contra las enfermedades !
    Autor: bgmedias
    Copyright
    Embadurnar los árboles frutales
    Embadurnar los árboles frutales
    Aplicación de un ungüento a base de cal.
    Autor: bgmedias
    Copyright
    Embadurnar los árboles frutales
    Embadurnar los árboles frutales
    Aplicación de un ungüento a base de arcilla.
    Autor: bgmedias
    Copyright


Mi Cuenta
Ofertas
Cesta 
0