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  • ¿Qué seria un jardín sin insectos libradores? Un vergel y un huerto donde no hay gran cosa que comer más tarde, porque son insectos que nos garantizan buenas cosechas, fecundando la mayor parte de las flores. Más vale cuidarlas dándoles plantas que les atraerán.

    Invite a todo el mundo
    Para mejorar la fecundación de las flores en el vergel, no sólo hay que apostar por las plantas que le gustan a la abeja doméstica. Incluya en sus plantaciones ornamentales flores que atraerán a las abejas solitarias y a los abejorros. Sólo estos últimos podrán fecundar, por ejemplo, las flores de las judías, que son muy profundas para las abejas comunes. Las flores profundas como las de las calabazas, son también mejor fecundadas por el abejorro. Pero las mejores polinizadoras de las flores de los árboles, siguen siendo las abejas. Volverán encantadas a su jardín si encuentran recursos interesantes durante todo el año.
    No olvide tampoco satisfacer a los libadores secundarios, como las moscas de flores, las avispas pequeñas (¡que no pican! ), las mariposas, etc. Ellos solos le pueden garantizar una buena cosecha. Pero si desgraciadamente una intemperie impide a las abejas y abejorros trabajar, estos libadores secundarios ¡son un seguro de una cosecha igualmente interesante! Lo ha entendido bien: la buena estrategia consiste en invitar la más gran diversidad de libadores a su jardín.

    Haga la buena selección
    En un jardín ecológico, las plantas salvajes son importantes porque les gustan a todos los libadores de los alrededores. Deje por tanto, estas partes que no ha plantado que tengan hierbas altas que crecen y córtelas en el otoño (quitando el heno). Un vergel que florece de forma artificial, con un césped impecable alrededor, estará peor libado que un vergel lleno de flores salvajes. Las plantaciones tienen, sin embargo, la ventaja de ofrecer recursos en las zonas en las que a los libadores les cuesta mantenerse, como en las regiones cerealistas, por ejemplo.
    En este caso, opte por plantaciones que mezclan las especies siguientes:
    Madroño, Espino blanco, Aliso, Caryoptera, Agracejo común, Escalonia, Elsholtzia, Exochorda, Retamas enanas, Glicina, Helenio, Heptacodium, Laureles salvajes, Lavanda, Malvas arbustivas, Hiedra, Altramuces, Melisa, Népéta, Avellano, Fotinia, Manzano de decoración, Endrino, Manzanillos, Romero, Salvias de flores pequeñas, Sauces, Espirea, Tomillo, Tréboles.

    Disponerlos correctamente
    Los libadores no son paisajistas y les da igual que instale sus plantas meliferas en lineas o en macizos. Si tiene colmenas, instàlelas a una decena de metros. Si desea ver sus àrboles frutales lo bastante frecuentados en el momento de la floración, escoja plantas que estarán en flor un poco antes y un poco después pero no al mismo tiempo, ya que los insectos tienen tendencia a concentrarse en los más « rentables » dejando de lado las flores menos ricas. Seria acertado mezclar los árboles frutales a las plantaciones meliferas, en bosquecillos o bien poniendo un seto en flores alrededor del sitio donde cultiva los arboles frutales.

    Pasen y vean
    Cuando las plantas estarán en flor, no dude en ir a mirar de cerca el tejemaneje de los insectos que están libando. Encontrará unas diferencias netas. Por ejemplo, los abejorros salen más tiempo que las abejas, incluso los días de lluvia. Pero algunos libadores hacen trampas, como la gran abeja carpintera: esta ¡tiene una trompa tan fuerte que agujerea las flores en vez de irse a frotar contra el polen!
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  • Escoger plantas meliferas
    Escoger plantas meliferas
    Invite a todo el mundo
    Autor: Jean-Michel Groult
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    Haga la buena selección
    Autor: Jean-Michel Groult
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