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El grano sembrado en su maceta ha salido,¡ Sin embargo, le queda los más delicado. Hay que efectivamente cuidar estas jóvenes plántulas para hacerlas engordar hasta que tengan la talla suficiente para plantarse en plena tierra en el jardín.
¡La luz !
Cuando las semillas germina, estas forman los cotiledones, que juegan un rol de hojas provisionales. En cuanto los cotiledones se han abierto, la planta necesita la luz en cantidad suficiente.
Acerque las macetas de una ventana expuesta al oeste, si siembra en interior. Eviteles el sol directo por el momento. Si el tallo bajo los cotiledones se « estira » demasiado, es porque las plántulas buscan la luz y hay que exponerlas mas.
Rápidamente, las hojas de verdad se forman entre los cotiledones. Las plántulas empiezan a engordar un poco.
Estas pueden después, empezar a molestarse, si las ha plantado muy apretadas. En este caso, debe aclarar, es decir arrancar delicadamente la mitad de las plántulas, incluso mas de la mitad. Las plántulas no deben tocarse.
Riegue delicada y regularmente, sin encharcar el substrato. Humedezca si le es posible hacia el medio día, y siempre por debajo. Airee igualmente las plantas unas horas al día, en un sitio resguardado de corrientes fuertes de aire.
Cuando haga sol y el tiempo sea suave, deje al aire libre. Si las deja permanentemente en una pieza confinada, estas podrían sufrir de la la « fundición » de la siembre, es decir, se mueren repentinamente. Las plántulas tiernas, como las de la albahaca, son muy sensibles. Puede limitar los riesgos espolvoreando la superficie de la maceta con con polvo de carbón de madera, justo en el momento del la siembra.
Replante
Cuando las plántulas hayan engordado lo suficiente para poder ser manipuladas, por ejemplo, la tercera hoja de verdad ( sin contar los cotiledones), vuélvalas a plantar en una maceta individual o en un recipiente los suficientemente ancho. Cójalas con cuidado levantándolas con una varilla para desenterrarlas.
Plantelas de nuevo espaciandolas de al menos 7 cm alrededor. Meta las plántulas en un agujero hecho con un palo, y empuje el substrato contra las raíces de forma que « calce » la plántula. Esta operación es delicada porque tenemos tendencia a hacer daño a las plántulas al manipularlas. El mantillo que utilice no necesita que se le mezcle con arena. Las siembras replantadas deben guardarse al aire libre y no ponerse en un recinto cerrado. Necesitan menos calor en en momento de la germinacion.
Déjelas engordar hasta que llegue el momento de plantarlas en plena tierra, por ejemplo después de las ultimas heladas de la primavera. Algunas plántulas crecen tan rápido, que no se replantan en maceta, si no directamente en plena tierra. Si la temperatura lo permite y si la plántula tiene al menos 3 cm de ancho, puede efectivamente replantar directamente los sujetos en plena tierra. Vigile los ataques de las babosas! - Fotos (3)
Hacer crecer las siembras
¡La luz !
Autor: Jean-Michel Groult
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Hacer crecer las siembras
Cuando las semillas germina, estas forman los cotiledones, que juegan un rol de hojas provisionales.
Autor: Jean-Michel Groult
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Hacer crecer las siembras
Riegue delicada y regularmente, sin encharcar el substratot.
Materiales para la siembra
Autor: Jean-Michel Groult
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