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Duran más de una estación. Conociéndolas mejor luchará más eficazmente contra estas plantas indeseadas!
Ortigas, gramíneas y compañía
Usted habrá visto ya estas malas hierbas vivaces: forman un tronco que tiene a menudo tendencia a extenderse año tras año, como las ortigas o la enredadera. Pueden incluso formar un arbusto o una liana si se las deja. La forma que tienen de perdurar es variable: para desherbarlas correctamente es preferible conocer un poco su biología. Evitará tener que volver a empezar a desherbar!
Las que crecen en grupos
Como las ortigas, que se extienden formando una colonia más o menos ancha. Los acolchados y desherbados térmicos no dan gran resultado: arránquelas con un herramienta, como una zarpa o con gubia levantándolas.
Las rastreras
Estas forman largos tallos que corren sobre el suelo y que se arraigan en cuanto tocan tierra. La agróstide y las yedras terrestres son las más frecuentes. La grama forma parte de éstas, con la diferencia de que sus raíces son subterráneas, lo que es peor! Cuando estas empiezan a invadir sus plantas cultivadas solo le queda una solución: quitarlas manualmente. En otras partes limítelas con la zarpa o con el herbicida térmico. El acolchado es poco eficaz porque pueden reptar por encima. Cada porción de tallo que deje da lugar al nacimiento de una planta entera.
Las rosetas
Forman un "plato" de hojas cerca del suelo y eliminan el resto, a semejanza del diente de león y de la hypochaeris. Estas se resiembran abundantemente. Para deshacerse de ellas el herbicida térmico (a pasar por el centro de la roseta) o el cuchillo para desherbar (elevando la gruesa raíz) son los dos métodos más eficaces.
Los "icebergs" Bajo el suelo se esconde lo necesario para regenerar una planta en cada estación. La bryonia (nuez blanca) posee un gran tubérculo, y la enredadera raíces carnosas que esconden reservas. Solo retirando esta parte subterránea se deshará definitivamente de la planta. Puede así arrancar los rebrotes en cuanto surjan para debilitar la parte subterránea; el resultado es largo e incierto.
Las lianas
Estas empiezan por un pequeño tallo delgado... y terminan por cubrir una gran superficie, como la clematide de los setos, las zarzas o el solanum (tomate enano). Se extienden sobre el resto de plantas, las privan de luz y las ahogan. La única solución es arrancar la planta desde su base y desenredarla de las plantas de alrededor si hace falta.
Los arbustos y los árboles
Pequeñas plántulas a veces se vuelven muy grande... e incluso gigantes! El sauco, por ejemplo, puede formar un tronco de 30 cm de diámetro y llegar a los 5 metros. No espere a que llegue esta situación para eliminarlo. Cuando el arbusto es todavía pequeño arránquelo con la mano, con una laya o con un pico. Más grande, tendrá que recurrir al método químico (que mata la planta pero no la quita físicamente). - Fotos (1)
Las malas hierbas perennes
Autor: Jean-Michel Groult
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