Esta enfermedad lleva bien su nombre porque ¡nos hace efectivamente pensar en el oxido ! Puede ser espectacular pero no es nuca grave para la vida de la planta. Se manifiesta sobre todo en los rosales, las malvarrosas y las plantas de la familia del ajo-puerro, a la vez que en algunos arbustos.
Los síntomas
En las hojas que no han terminado completamente de desarrollarse, aparecen unos pequeños puntos naranjas, que toman un relieve y engordan. Cogen una textura polvorosa unas semanas mas tarde, signo d que la enfermedad esta lista a extenderse, el hongo responsable ha llegado a su fase de reproducción. Las hojas muy afectadas pueden ser deformes. En cualquier caso, amarillean y se caen de forma prematura.
Su ciclo
Todo empieza por la germinación de una espora (germen microscópico que se parece a una mota de polvo) en la superficie de la hoja. A menudo, la espora ha sido depositada en la planta por una gota de agua de lluvia que ha rebotado desde el suelo. El hongo desarrolla sus filamentos en los tejidos de la hoja y prolifera, lo que causa una aparición de manchas y marchitacion localizada. Cuando las condiciones son favorables, es decir, que el tiempo es suave y húmedo, el oxido se desarrolla en unos pocos días. Cuando las condiciones se vuelven desfavorables, porque hace demasiado frío o el tiempo esta demasiado seco, su desarrollo se interrumpe. Si la planta esta en crecimiento en este momento dado, las hojas jóvenes se quedan indemnes.
Cómo luchar
La roya un hongo sensible a los productos derivados del azufre, pero igualmente los extractos vegetales que tienen una acción contra los hongos patógenos. Al principio del ataque no es necesario acudir a estas soluciones, le bastara con retirar las partes afectadas para evitar que la enfermedad se extienda. Es únicamente en caso de ataque generalizado que debe de pensar en una pulverización, ya sea con azufre, o con un extracto de cola de caballo.(a diluir).
Cómo evitarlo
El uso de variedades resistentes a las enfermedades, sobre todo en los rosales y las plantas del huerto sensibles a la roya, limita los riesgos. Un suelo demasiado húmedo en el huerto anima a la enfermedad a instalarse en las verduras. No deje tampoco rodando las hojas enfermas a los pies de la planta. Como otras enfermedades, la roya es una enfermedad oportunista, que se desarrolla sobre todo en los órganos debilitados, como las hojas de finales de la temporada. Su aparición indica que es la hora de proceder a una limpieza de la vegetación mas que a un tratamiento. !Por otro lado, la presencia de plantas de compañía que se supone que deben alejar las enfermedades (como el ajo), no tienen mucha eficacia, !si alguna vez la hubo !
Bueno a saber
Como el oídio (el mal blanco de las hojas), la roya que ataca a una planta, no puede contaminar una planta diferente. Por ejemplo, la roya del rosal no puede transmitirse a los ajos puerros. Es porque las condiciones son favorables a las enfermedades causadas por los hongos en general, que podemos ver aparecer simultáneamente la roya en plantas muy distintas.