Que gusto ver esos granitos dar vida a una plántula ! Hacer germinar no es difícil, pero mimar una planta muy joven nos pide un poco de cuidados. Siga la guía!
El buen material
Para lograr sus siembras equipese con un buen material.
Primero las macetas; de plástico y bastante grandes, al menos 10 cm de ancho y lo mismo de alto.
El mantillo: el que encuentra en las tiendas va muy bien, no lleva ningún grano de malas hierbas.
Sembrar en la tierra del jardín no da muy buenos resultados. Existen tierras de siembra, pero puede utilizar una tierra estandar. Si se pega un poco a los dedos, mezcle con la mitad de arena. Le hará falta un recinto de siembra: un mini invernadero o un bastidor. Y las semillas tan frescas como les sea posible. Las viejas sobras de paquetes que tiene en un rincón desde hace tiempo, raramente dan buenos resultados...
Empiece por rellenar las macetas con la tierra o una mezcla para siembra, y aplane (con la mano o con un objeto llano). El substrato debe llegar a 2cm aproximadamente del borde.
Disperse los granos en la superficie, espaciandolos de al menos 5mm. Recúbralos con una capa fina de tierra de 5 mm de espesor, no más. Aplane ligeramente de nuevo, para que las semillas se « peguen » al substrato. Si la siembra es muy fina, no cubra las semillas: estas crecerán sin estar cubiertas. No olvide de anotar el nombre de la variedad sembrada en una etiqueta y ponerla en la maceta.
Ponga las macetas de su siembra en u platillo de 5 cm de altura y lleno con agua. Deje el contenido de la maceta empapandose por debajo, durante varias horas.
Resguarde
Ponga sus macetas en un sitio protegido de las inclemencias, como en un mini invernadero por ejemplo.
La temperatura debe estar adaptada a la variedad sembrada. La mayor parte de las plantas crecen a 20°C, pero algunas exigen una temperatura más cálida ( berenjenas, albahaca y numerosas plantas exóticas).
Otras prefieren una temperatura más fresca como las prímulas, alhelís y todos los arbustos de exterior. El brote requiere mas o menos tiempo; entre una semana y varios meses. Le hará falta, durante este tiempo, conservar el substrato siempre húmedo, regando suavemente, o empapando las macetas por debajo.
Inspeccione las macetas regularmente, para localizar los brotes. Porque una vez que las semillas hayan germinado, una nueva tarea empieza: Cuidar al bebe !
¿ Y la luna ?
La influencia de la luna en las siembras, aunque la siguen numerosos jardineros, es una leyenda sin fundamento científico. Los horticultores y los arboricultor no se preocupan de la influencia del astro de la noche en sus siembras.¡ Esto no les impide de tener muy buenos resultados !